Educación internacional: beneficios de estudiar en una institución fuera de mi país

La educación internacional puede abrir muchas puertas a nivel laboral, pero también da paso a un mundo increíble de oportunidades a nivel personal. Por este motivo, cada vez son más las personas que se lanzan a la aventura de completar su formación en el extranjero.

Es natural tener dudas por todo lo que representa. Aun así, lo que está claro es que quien da el paso reconoce que es una experiencia que marca su vida en todos los sentidos. Por eso, hoy abordamos cuáles son las ventajas de estudiar en el extranjero.

¿Cómo escoger una educación internacional?

En la actualidad, la mayoría de estudiantes europeos hablan con fluidez un par de idiomas, y no es raro encontrarnos con quienes hablan 4 o 5. Además, estudiar o trabajar en un entorno internacional ofrece la posibilidad de disfrutar de un aprendizaje multicultural único.

En este sentido, los programas de intercambio son una buena opción para impulsar el desarrollo personal y añadir esa experiencia de carácter internacional al perfil. Pero ¿dónde podemos ir? Una vez se ha tomado la decisión de hacerlo, se deben tener en cuenta los siguientes aspectos:

• Prestigio y sistema de enseñanza de las universidades

  El prestigio de una institución académica puede tener un impacto significativo en cómo futuros empleadores perciben tu educación. Los rankings universitarios, como los proporcionados por QS, Times Higher Education y Shanghai Ranking, ofrecen una visión objetiva de la reputación y el rendimiento académico de las instituciones.

• Nivel de vida

  El costo de vida puede variar considerablemente según la ubicación de la universidad. Es vital tener en cuenta el presupuesto necesario para cubrir gastos como alojamiento, alimentación, transporte y entretenimiento. Algunas ciudades y países presentan un alto costo de vida, mientras que otras son más asequibles.

• Ubicación

  La elección de la ubicación puede influir en la experiencia global. Factores como el clima, la cultura, las oportunidades de empleo y la accesibilidad a diferentes lugares deben ser considerados detenidamente.

• Popularidad

  Lugares como Barcelona, París o el Silicon Valley se han convertido en puntos de encuentro para disfrutar de experiencias internacionales. La popularidad puede resultar en una mayor diversidad estudiantil, enriqueciendo así tu experiencia de aprendizaje y ampliando las oportunidades de networking.

Los mejores programas de intercambio para un aprendizaje multicultural

Los convenios entre diferentes universidades son esenciales para garantizar la convalidación de las asignaturas. Asimismo, la ayuda económica será fundamental para hacer más llevadera esta experiencia educativa.

¿Qué programa debemos escoger? Tenemos a nuestro alcance diferentes opciones:

• Programas Internacionales

  Estos programas brindan la oportunidad de estudiar en una institución internacional, permitiéndote sumergirte en un nuevo sistema educativo, ampliando tus conocimientos y  tu red de contactos.

• Bootcamps
  

  Los bootcamps son programas intensivos de capacitación en habilidades específicas, como marketing, big data o liderazgo. Optar por un bootcamp en un entorno multicultural no solo te permite adquirir habilidades valiosas, sino también trabajar en equipo con personas de diferentes orígenes y culturas.

• Certificaciones Internacionales
  

  Obtener certificaciones internacionales en áreas como idiomas, tecnología o negocios puede ampliar tus perspectivas laborales y enriquecer tu currículum. Estas certificaciones son reconocidas globalmente y pueden abrirte puertas en diversos campos.

Ventajas de estudiar en el extranjero

Según la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), para 2025 unos 8 millones de personas estudiarán fuera de sus países de origen. Por eso, queremos destacar algunas de las ventajas de estudiar en el extranjero más relevantes.

Aprender un idioma

La globalización nos obliga a manejar varios idiomas con fluidez. Y está claro que el chino, el español o el inglés, entre otros, nos abren muchas puertas. Por tanto, estudiar fuera es indispensable para practicarlos y perfeccionarlos.

Adentrarse en una sociedad que habla un idioma diferente y tiene una cultura distinta nos provee de un aprendizaje único que no se consigue con la teoría en clase. El acento local y los modismos nos convertirán en personas más auténticas y nos ayudarán a conectar con facilidad con más personas.

Crecer de forma personal

No conviene dejar de lado la parte emocional de vivir en el extranjero. Enfrentarse a nuevos lugares, escapar de la rutina y salir de la zona de confort nos posibilita conocernos mejor y madurar.

Entre otras enseñanzas, esta experiencia nos ayuda a superar la timidez, forjar una identidad, mejorar la confianza en nosotros mismos, derribar prejuicios o tener una mayor consciencia de nuestros actos.

Conocer una cultura diferente

Otro de los beneficios más reseñables es que se abre la mente. Es una excelente forma de adquirir una perspectiva más global a nivel profesional, económico, social y cultural. En algunos países (como Australia o Canadá) hay constantes diferencias de pensamiento, por tanto, es necesario volverse más flexible. Asimismo, esto nos permite valorar mejor las necesidades propias y ajenas.

Cuando esto sucede se desarrollan competencias y habilidades sociales que resultan muy necesarias en los entornos laborales para crear sólidos equipos de trabajo.

Ampliar la red de contactos

El networking o la red de contactos que podemos crear fuera de nuestras fronteras es mucho más amplia. Además, mantenerla es muy sencillo gracias a la tecnología. Siempre se puede recurrir a ella cuando se requiera un punto de vista diferente o una recomendación. De igual manera, esta red puede proporcionarnos interesantes oportunidades laborales.

Mejorar el perfil profesional

En la actualidad, los responsables de RR. HH. de las grandes empresas tratan de crear entornos diversos y multiculturales. De este modo, la perspectiva de la organización no tiene límites.

Por eso, incluir en el currículum que se han realizado diferentes programas de educación en el extranjero o que se han llevado a cabo colaboraciones profesionales fuera de las fronteras nacionales es un buen reclamo.

No obstante, hay quien, por diferentes motivos, no puede irse a vivir al extranjero. Pero esto no tiene por qué limitar el aprendizaje continuo y su educación internacional. En estos casos, se puede recurrir a programas formativos online o blended como los que tenemos en IBERONEX sobre marketing y ventas, fintech y banca digital o gestión sostenible en la empresa.