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Cuarta Revolución Tecnológica: competencias para el cambio

La cuarta revolución tecnológica está siendo posible gracias a la irrupción de la automatización, la transformación digital, la industria 4.0, etc. Y este proceso de cambio tiene un gran impacto en el día a día de las diferentes empresas y organizaciones del tejido productivo nacional e internacional.

En la actualidad, asistimos a un rápido proceso disruptivo que tiene unas repercusiones globales e integra tecnologías que están cambiando el entorno productivo. Así, en este contexto de transformación y globalización, estamos casi obligados a adquirir competencias para el cambio y habilidades digitales con el objetivo de no perder la competitividad.

 

Adaptación al avance tecnológico

La formación permanente es necesaria para conseguir la adaptación al avance tecnológico. Para afrontar todos los cambios que se suceden durante la vida laboral y vivir en este nuevo paradigma, no hay mejor modo que con el aprendizaje continuo.

Las destrezas básicas seguirán siendo esenciales, pero ser permeable y flexible para adquirir nuevas habilidades y conocimientos es imperativo si no se quiere caer en el olvido laboral.

Por ello, es necesario observar, analizar e integrar capacidades de corte transversal que aceleren la adaptación al cambio digital. Los perfiles técnicos ya no son los únicos que deben conocer las novedades tecnológicas, esto afecta a todo tipo de ocupaciones y sectores económicos y productivos.

Así, es preciso afrontar programas con una estrategia formativa adecuada que nos mantengan actualizados. Por ejemplo, podemos recurrir a programas como los de marketing digital y customer experience, logística y supply chain o emprendimiento y transformación digital.

 

Habilidades digitales y competencias para el cambio

Que la tecnología tiene un peso muy importante en nuestras vidas y ocupaciones es un hecho. Además, los acontecimientos sanitarios y económicos recientes han supuesto un gran impulso para la digitalización y la preparación para una nueva etapa. Hablamos, por supuesto, de la cuarta revolución tecnológica, lo que exige un período de adaptación a la nueva realidad, tal y como sucedió con el resto de revoluciones industriales.

No obstante, esto no quiere decir que se vayan a destruir puestos de trabajo. Los datos del Foro Económico Mundial apuntan a que, en 2025, el 47 % del trabajo del planeta estará automatizado. Sin embargo, también se crearán diversos puestos de trabajo apenas conocidos y otros que todavía están por irrumpir en la sociedad. Precisamente, esto es lo que debe impulsarnos a adquirir nuevas habilidades digitales y competencias que marcarán los destinos de los trabajos.

Veamos cuáles son las más importantes:

 

1. Resolución de problemas

Una de las habilidades decisivas en este siglo XXI es el pensamiento computacional. A diario afrontamos, en distintos ámbitos, problemas diversos. Sin embargo, la capacidad de resolverlos es la que más se valora a nivel profesional.

A su vez, entre las competencias más solicitadas están el diseño de algoritmos de soluciones, el uso de la abstracción y la capacidad de análisis y de detección de patrones. Gracias a estos 3 pilares, es posible hallar y diseñar las estrategias adecuadas para la resolución de problemas.

 

2. Creatividad

Muchas de las habilidades y competencias de los humanos pueden desarrollarlas los robots. Por eso mismo, la creatividad resulta determinante en la actualidad. Las personas más creativas pueden proponer e implementar ciertas ideas con rapidez y eficacia, algo muy interesante para las organizaciones.

 

3. Empatía, trabajo en equipo y pensamiento crítico

Para dar con las mejores soluciones y trabajar en equipos cohesionados, hay que tener empatía. De este modo, se aprovechan los puntos fuertes de cada miembro y el conjunto es mucho más eficiente a la hora de solucionar aquello que se le solicite.

Cuando se trabaja en equipo, es necesario saber escuchar y tener empatía. Así, ante un problema, una de las primeras competencias que se requieren es saber escuchar. Esto nos permite analizar las propuestas de otras personas y adentrarnos en sus puntos de vista. En consecuencia, si tienes esta habilidad te resultará mucho más sencillo abordar con eficacia la situación planteada.

Además, al desarrollar un pensamiento crítico, es mucho más sencillo dar con soluciones creativas y eficaces.

 

4. Comunicación y liderazgo

Tan importante como saber escuchar es saber comunicarse. Compartir una opinión o pensamiento sobre un tema concreto, en muchas ocasiones, puede ser un caos. Por tanto, adoptar un registro apropiado es clave para comunicarse de forma comprensible y clara.

Asimismo, ser capaz de argumentar y transmitir aquello que se desea a la audiencia es imprescindible. Sin esto, las ideas se desvanecen y no se pueden ni desarrollar ni mejorar. Con una buena comunicación se puede empoderar y liderar a un equipo de trabajo para hacer de un proyecto una realidad.

 

5. Organización y autogestión

Otra de las competencias para el cambio pasa por la capacidad de organización. No es sencillo gestionar los recursos (materiales y humanos) de los que se dispone de una manera eficiente. Y quien sabe hacerlo tiene mayores posibilidades de promocionar o de acceder a puestos de responsabilidad.

Saber analizar los recursos en profundidad para poder aprovecharlos al máximo será esencial para elaborar soluciones de una manera rápida, sencilla e inteligente.

 

6. Programación y habilidades STEAM

Aunque lo dejemos para el último lugar, también son relevantes las habilidades técnicas. Por ejemplo, la programación forma parte del día a día y cada vez tiene una mayor presencia. Dentro de no mucho, saber programar será tan básico como leer o escribir, y quien no adquiera esta competencia estará en clara desventaja en la nueva realidad que se está gestando.

 

Por eso, cada vez ganan mayor peso los diferentes programas formativos que pueden ayudarnos a mejorar las habilidades y competencias digitales que poseemos. A pesar de que estés en un buen puesto de trabajo, si no te involucras y te sumerges en un proceso continuo de formación a lo largo de tu vida, te quedarás atrás.

Esta cuarta revolución tecnológica reclama que todas las personas seamos capaces de adaptarnos a los cambios tecnológicos y demos un paso al frente para promover la transformación. Y, para ello, es preciso recibir la formación adecuada enfocada en las necesidades de la sociedad y en los sectores económicos y productivos. En IBERONEX estamos comprometidos en proveerte de las habilidades y competencias pertinentes para que no te quedes atrás.

 

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